Son las 11h, nos colgamos el material y comenzamos por una pala de unos 45/50º de nieve bastante mala de andar y que nos cuesta un triunfo avanzar los 50 metros que nos separan del primer resalte. Aquí nos encordamos y Pelayo sale para arriba. Un resalte de unos 6m (el año anterior estaba completamente en roca-tramo de 10m desplomado y roca algo descompuesta) que se pone a 90º y que no está muy bien para proteger. El hielo está algo "pobre" en algunos tramos pero buscando se sale sin mayores problemas. Tras otros 50 metros sobre nieve a 45/50º, se monta reunión en un nicho.
Sale Vidal como un rayo, llega a la reunión y continúa hasta agotar la cuerda. Pone un tornillo con un bloqueador, da la orden a Pelayo y continúan en ensamble. Vidal se encuentra un resalte de unos 5 metros a 60º, continúa hasta otro resalte de 10 metros donde protege con 3 tornillos, uno de ellos con otro bloqueador y le supera sin problema, a pesar de tener 80/85º en sus dos metros finales, una media de 70º y 120 metros de cuerda colgando.
Avanza otros 60 metros más por otra capa de nieve a 50º y monta reunión en otro nicho en el que poco le faltó para morir de claustrofobia.
Sale Pelayo, pasa el primer resalte (60º) y llega al segundo; cuando está en el tramo vertical se le sale la hoja del piolet (había quitado la pala de éste y no había puesto el tornillo....), la hoja se pone casi paralela al mango y poco puede hacer. ("Pilla cuerda, Vidalllllll); sube arrastrándose, como puede; da una patada y ve como su crampón izquierdo se sale y se queda colgando de la cinta (se había sacado una talonera con el otro pie). Sale del resalte, sopla, acalda el crampón otra vez y ñapea el piolo y hasta la reunión. "¿Qué coño haces ahí empotrao, Vidal?"
Se prepara Pelayo para el último resalte de hielo; parece bastante escaso, así que mete un ancla justo en su base, pero Vidal ya lo tenía previsto y montó una reunión segura. Resalte de unos 8 metros con salida a 85º que desemboca en una campa de nieve en la que hay que hacer una travesía expuesta a la izquierda.
Tras la travesía toca hacer 50 metros de nieve a 45/50º. Las cuerdas pesan lo suyo. Monta reunión y sale Vidal a 100Km/h bajo una nevada de las buenas, con trapos como manzanas (algo menos....).
Vidal pasa junto a la reunión, saluda y sale arriba, al Collau del Llaz, donde termina la vía y tras hacer 40 metros más a 50º (15:00h).
Después de Arriba nos esperan Javi y Samu con el equipo de grabación y con más cara de frío que de calor. Han sido 400 metros de vía y 4 horas de escalada. Últimas tomas y pal refugio, que la nevada continúa.
Una vez en el refugio, Pablo y Miguel se han metido una trisca con la pala que mete miedo. Han espoleado más metros cúbicos de nieve que ni se sabe.
Nos preparamos las mochilas, acaldamos el material, comemos bién a gusto y nos metemos un chupito de orujo (no era lebaniegu, pero bueno.....jaja) y brindamos por un fin de semana perfecto, en un lugar sin igual y con una gente excepcional. Se intuye el buen ambiente, la falta de competencia y rivalidad y las ganas de innovar. Es algo histórico coincidir 6 personas en Jermoso con esa nevada y con esa amistad; de verdad, es un placer haber compartido esa jornada.